La Gobernación de Caldas, a través de la Jefatura de Gestión del Riesgo de Desastres y la Secretaría de Medio Ambiente, lideró este lunes una sesión ampliada del Consejo Departamental de Gestión del Riesgo. El objetivo fue evaluar el avance de la Calamidad Pública declarada el pasado 6 de junio y revisar las condiciones actuales de la temporada de lluvias, marcada por el desarrollo del fenómeno de La Niña en el país.
Análisis climático y decisión del Consejo
Durante la jornada se socializaron los recientes reportes del IDEAM, los cuales indican un patrón climático asociado al fenómeno de La Niña, que aumenta la probabilidad de precipitaciones por encima de los promedios históricos durante los próximos meses.
Ante este escenario, el Consejo Departamental aprobó por unanimidad prorrogar por seis meses la Calamidad Pública Departamental, con el fin de mantener la articulación interinstitucional, fortalecer la capacidad operativa y asegurar una atención oportuna ante posibles emergencias en el territorio.
“Se hizo la exposición general sobre cómo avanzamos en la calamidad y la necesidad de ampliar esta declaratoria por seis meses más, decisión que se tomó en pleno con el Consejo Departamental”, explicó Paula Marcela Villamil Rendón, jefe de Gestión del Riesgo de Caldas, quien destacó que la articulación institucional sigue siendo clave para preservar la vida y garantizar respuestas oportunas.
Rol de la Policía Nacional en la atención de emergencias
La sesión contó con la participación activa de la Policía Nacional. Su comando departamental resaltó el papel operativo que cumplen sus unidades durante las contingencias.
“Para nosotros son muy importantes estos espacios porque somos casi que los primeros respondientes cuando estas calamidades se presentan. Poder generar protocolos de atención inmediata nos permite actuar con rapidez y prevenir mayores afectaciones”, señaló la coronel Rocío Milena Melo Puerto, comandante del Departamento de Policía Caldas.
Organismos de socorro: coordinación para una respuesta eficiente
El delegado departamental de Bomberos, capitán José David Mejía, enfatizó el valor del trabajo conjunto entre entidades operativas, socorro y autoridades departamentales.
“En este encuentro nos articulamos todas las instituciones para hacer frente a las amenazas por las temporadas de lluvia que estamos viviendo y las que se avecinan. Es clave conocer las capacidades de cada entidad para responder y solicitar los apoyos necesarios de manera eficiente”, afirmó.
Revisión de capacidades y puntos críticos
El Consejo también revisó los protocolos de la Estrategia Departamental de Respuesta a Emergencias (EDRE), así como los puntos críticos priorizados por la Secretaría de Infraestructura, especialmente aquellos que se han visto afectados por deslizamientos, crecientes súbitas o fallas estructurales recientes.
Estas actualizaciones permiten ajustar los planes operativos, las rutas de atención y las capacidades interinstitucionales, reafirmando el compromiso del departamento con la prevención, la preparación y la atención integral ante cualquier situación de emergencia.
Compromiso del territorio
La sesión concluyó con el llamado a mantener la vigilancia constante de las condiciones climáticas, fortalecer los sistemas de alerta temprana y promover acciones de autoprotección en las comunidades, especialmente en zonas rurales y áreas con historial de riesgos.
Caldas ratifica así su liderazgo en la gestión del riesgo y su decisión de actuar de manera planificada, preventiva y articulada frente a una temporada de lluvias que exige atención permanente.
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